Ángel quiere decir mensajero y los Ángeles Custodios (o de la Guarda) son los mensajeros que Dios ha puesto al lado de cada hombre para que le ayuden en todo, también en las cosas materiales, pero especialmente en aquello que une al hombre con Dios. El único requisito para recibir la ayuda del Ángel es hablar con él, pues a los Ángeles les ocurre lo que a los hombres, que sólo conocen lo que les contamos. Ya desde el Antiguo Testamento existe la creencia en los Ángeles Custodios. Por ejemplo, el Salmo 90, dice: "A sus Ángeles ha dado orden Dios para que te guarden en tus caminos". En el Nuevo Testamento son citados 179 veces. Incluso el mismo Jesús, en el Evangelio de San Mateo, advierte: "Cuidad de escandalizar a ninguno de estos pequeñuelos, porque sus ángeles están siempre presentes contemplando el rostro de mi Padre Celestial".

 

Los cristianos también son mensajeros de Dios y deben ser como Ángeles Custodios para los demás hombres.

 

 

 

[Las fuentes principales, que no las únicas, de las que se han tomado los datos para redactar la Sección "Hoy no se olvide de felicitar a…", y a cuyos autores se muestra el agradecimiento y reconocimiento debidos, son las siguientes:

Direcciones de Internet: archimadrid. es; churchforum.org; aciprensa.com; encuentra.com; planalfa.es; ewtn.com; serviciocatolico.com; buscabiografias.com; y es. catholic.net.

Libros: Los clásicos de siglos pasados de Santiago de la Vorágine, Ribadeneira y Croisset; "Nuevo Misal Popular Iberoamericano"; Dos mil Años de Santos", Ed. Palabra; "El libro de los santos", Ediciones Internacionales Universitarias; "La casa de los santos", Ed. Rialp; "Los santos del calendario cristiano", Ed. San Pablo; "Il grande libro dei Santi", Edizioni San Paolo; "Gran Enciclopedia Rialp"; "Año Cristiano" Ed. B.A.C; y "Nuevo Año Cristiano", EDIBESA; estas cuatro últimas publicaciones facilitan las mejores referencias bibliográficas sobre Ángel (Santos Ángeles Custodios)].

 

 

                                                                                                                      Pilar Riestra