Sr. Director:
El mismo día, a la misma hora y en el mismo medio, leo los tres titulares siguientes: 1.-La UE acuerda aumentar la tolerancia de OGM en las importaciones de piensos.

 

2.-Amigos de la Tierra asegura que los cultivos transgénicos agonizan.

3.-La superficie mundial de cultivos transgénicos se incrementó un 10,4% en 2010.

Después de estos titulares, pienso y me pregunto: ¿quién dice la verdad?

En el primer artículo leo:

Los países de la Unión Europea (UE) acordaron aumentar la tolerancia de organismos genéticamente modificados (OGM) en las importaciones de materia prima para piensos, con el fin de facilitar el abastecimiento de los ganaderos europeos. El Comité Permanente de la Cadena Alimentaria -formado por expertos de los 27- apoyó que esos envíos puedan contener hasta un 0,1 por ciento de residuos accidentales de transgénicos, de variedades aún pendientes de aprobación o cuya autorización haya expirado en la UE, pero que sí se admiten en países terceros. Recordemos que en Europa está prohibido su cultivo.

Fuentes de la Comisión Europea (CE) explicaron que el objetivo es acabar con la incertidumbre de algunos operadores que venden en el mercado piensos con materias primas de países terceros, a la vez que se facilita el abastecimiento a los ganaderos europeos. Tengamos en cuenta que la UE importa grandes cantidades de maíz y harina de soja de Argentina, Brasil y Estados Unidos, donde se aceptan los OGM y estos envíos son un suplemento esencial para la ganadería. Los 27 países comunitarios adquirieron del exterior cuatro millones de toneladas de maíz y 33 millones de harina de soja de los tres países citados, en la campaña 2008-2009.

La Federación Europea de Fabricantes de Piensos (Fefac) valoró la solución técnica acordada por los países de la UE, respecto a la tolerancia de transgénicos, porque mejora la seguridad legal para las empresas del sector, ya que iguala los análisis y los muestreos.

En el segundo:

La organización ecologista Amigos de la Tierra ha planteado que los cultivos transgénicos agonizan en Europa. En un informe sobre transgénicos, ha apuntado que apenas el 0,06 por ciento de los campos europeos se cultivan con transgénicos. No hablan de que no se cultivan porque están prohibidos en Europa ni de los millones de hectáreas que se siembra en el resto del mundo.

El responsable de agricultura y alimentación de Amigos de la Tierra ha afirmado en un comunicado que estos cultivos no tienen ningún futuro en Europa por la fuerte oposición social, sus demostrados impactos ambientales, sociales y económicos, y por los riesgos que plantean sobre la salud.

En el informe no se aporta ningún dato estadístico ni que hace 15 años que se cultivan sin que se haya producido ninguno de los supuestos impactos. Tampoco que en Europa no se siembran debido a la presión que ejercen ellos mismos. Recordemos que sólo se permite cultivar un maíz Bt y, desde el pasado verano, una patata.

En el tercero:

Un informe anual publicado el mismo día por el Servicio Internacional para la Adquisición de Aplicaciones Agrobiotecnológicas (ISAAA), en él se detalla que el número de agricultores que cultivaron semillas modificadas genéticamente se situó en 15,4 millones, de los que más del 90% fueron pequeños productores con escasos recursos. La superficie mundial de cultivos transgénicos aumentó un 10,4 por ciento en 2010, hasta los 148 millones de hectáreas.

Por países, destaca Estados Unidos, con 66,8 millones de hectáreas; Brasil (25,4 millones); Argentina (22,9 millones); India (9,4 millones); Canadá (8,8 millones); China (3,5 millones); Paraguay (2,6 millones) y Pakistán (2,4 millones). A éstos le siguen, Sudáfrica, con 2,2 millones de hectáreas; Uruguay (1,1 millones); Bolivia (900.000 hectáreas); Australia (700.000 hectáreas); Filipinas (500.000 hectáreas); etc.

En el caso de la Unión Europea (UE), el informe recoge que ocho países comunitarios sembraron cultivos transgénicos, seis de los cuales cultivaron 91.193 hectáreas de maíz bt (resistente a la plaga del taladro). Se espera que en 2011 las hectáreas sembradas se incrementen hasta 200 millones y se produzca en 40 países (en la actualidad son 29, 10 industrializados y 19 en vías de desarrollo).

Según el Presidente del ISAAA, estos cultivos contribuyen a la sostenibilidad, ayudan a mitigar el cambio climático y alivian la pobreza en los países con escasos recursos.

Yo ya me he contestado a la pregunta, aunque tal vez sería mejor cambiar la pregunta por: ¿quién no dice la verdad? Espero que cada uno de los lectores haga lo mismo.

*Una aclaración: el medio en el que se publicaban no es especializado sino general sobre temas agropecuarios.

Jesús Domingo