• Mitsubishi confiesa haber manipulado los test de consumo de combustible de 625.000 vehículos.
  • Volkswagen también manipuló las mediciones de las emisiones de gases.
  • Renault anunció un ajuste en las emisiones de los motores diésel de vehículos ya vendidos.
  • Y Toyota realizó entre 2009 y 2010 una llamada a revisión de vehículos debido a un problema con sus aceleradores.
El presidente de Mitsubishi Motors, Tetsuro Aikawa, ha admitido que su compañía manipuló las test de eficiencia energética de 625.000 vehículos, en una rueda de prensa en la sede en Tokio del Ministerio de Transporte, informan agencias. A pesar de ser japonés por el momento no se ha suicidado. Aikawa ha reconocido que la compañía japonesa "manipuló los test para presentar mejores rendimientos energéticos". El falseado de las pruebas tuvo lugar mediante una modificación de la presión del aire aplicada a los neumáticos, lo que repercutió en los datos sobre consumo de combustible proporcionados por la empresa a las autoridades sobre cuatro modelos de minivehículos comercializados en Japón. Este escándalo se une al de Volkswagen: en septiembre de 2015 salió a la luz que Volkswagen había instalado ilegalmente un software para cambiar los resultados de los controles técnicos de emisiones contaminantes en 11 millones de automóviles con motor diésel, vendidos entre 2009 y 2015. Como resultado de este fraude, sus motores habían sorteado con éxito los estándares de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA). Los vehículos implicados emiten hasta 40 veces el límite legal de óxido de nitrógeno por lo que se pone en duda si los motores diésel de la compañía alemana son en realidad más limpios que sus motores de gasolina. Por su parte, el fabricante francés Renault anunció recientemente que iba a realizar una serie de ajustes en los motores diésel de sus coches de la norma Euro 6b, tanto los que se fabricarán en el futuro como los que ya están en servicio, que permitirán reducir a la mitad las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) en condiciones reales, informó Negocios. Asimismo, Toyota realizó entre 2009 y 2010 una llamada a revisión de vehículos debido a un problema con sus aceleradores, que parecían atascarse. Al menos 34 personas murieron por los fallos en los modelos de la marca Toyota en Estados Unidos, según informaron las autoridades de ese país para seguridad vial y medios locales. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com