• El presidente venezolano amplía el cierre fronterizo y ha desplegado ya a 8.000 efectivos en zonas de seguridad desde agosto.
  • La prueba del algodón de la tiranía: la Corte Interamericana de Derechos Humanos ordena restablecer la señal de Radio Caracas Televisión.
El presidente-dictador de Venezuela, Nicolás Maduro (en la imagen), necesita un enemigo exterior con el que enardecer a las masas y justificar todo tipo de atropellos a los derechos humanos. Enemigos exteriores de Maduro han sido EEUU, España y ahora le toca el turno, con mayor intensidad, a Colombia. En ese sentido, Maduro lleva dos semanas desplegando efectivos militares -unos 8.000 desde agosto- y cerrando las fronteras con Colombia para justificar las deportaciones de colombianos (unos 1.200) argumentando actividades ilegales de contrabando y paramilitares. Si el primer lugar cerrado fue la frontera entre Táchira y Norte de Santander, este lunes ha sido el cruce de Paraguachón, en la zona que el estado venezolano del Zulia colinda con La Guajira, recoge BBC. Lógicamente, estas arbitrarias decisiones del chavista están generando tensión con Colombia, que alega que los derechos humanos de miles de colombianos fueron violados al ser desplazados "forzadamente" de sus casas. De hecho, al menos 8.000 colombianos han tenido que emigrar. Pero sectores de oposición venezolanos sostienen que el cierre fronterizo busca generar un enemigo externo y un ambiente de emergencia en vísperas de las elecciones parlamentarias de diciembre, a las que Maduro llega golpeado por las crisis económica venezolana. Así que no es descartable que el presidente-dictador en el fondo busque un conflicto armado para enardecer a sus masas. Durante su alocución, Maduro también dijo que está dispuesto a retomar las conversaciones con Colombia y aprovechó la oportunidad para enviarle un mensaje al mandatario colombiano. "Vamos a restituir las relaciones de diálogo. No me huya más", le dijo a Juan Manuel Santos. "El único que puede poner condiciones soy yo, porque somos los agredidos", insistió. Poco antes, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, había reiterado su disposición a conversar "previo cumplimiento de las condiciones humanitarias mínimas que establecimos". "Desde el primer día, el día en que cerraron la frontera, quise hablar con el Presidente Maduro pero no fue posible. Lo que sucedió a partir de ese momento, el país y el mundo lo conocen", dijo Santos. Y en medio de todo esto, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) falló este lunes a favor del restablecimiento de la señal del canal de televisión venezolano Radio Caracas Televisión (RCTV), que se vio obligado a cerrar en mayo de 2007 después de que el presidente Hugo Chávez ordenara poner fin a la concesión del medio de comunicación, uno de los más antiguos de ese país sudamericano. "El Estado deberá restablecer la concesión de la frecuencia del espectro radioeléctrico correspondiente al canal 2 de televisión", indica el fallo que además ordena al estado venezolano "devolver los bienes objeto de las medidas cautelares" que favorecieron al canal. El fallo fue de cinco votos a favor y dos en contra. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com