• En total, 78 antiguos directivos y consejeros.
  • A Blesa se le acumulan los problemas: Anticorrupción pide imputarle por asignarse una indemnización de 2,7 millones de euros.
  • El 'desfile' ante el juez Andreu comenzará el próximo 16 de febrero.

No importa si utilizaron más o menos la tarjeta opaca que les entregó Cajamadrid. El juez de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, no ha tenido en cuenta la cantidad de dinero gastado a cargo de las 'tarjetas black' y ha imputado a los 78 antiguos directivos y consejeros que hicieron uso de ellas. Están todos los que son. Sólo se salvan los tres exconsejeros que no las utilizaron: Félix Sánchez Acal, Íñigo Aldaz y Esteban Tejera.

Según el auto notificado este miércoles, lo fundamental es "dilucidar el concepto por el que emitieron y entregaron las tarjetas de crédito". Es decir, el juez quiere aclarar si se emitieron como gastos de representación o como complemento de retribución. El juez se apoya, además, en la sentencia del Tribunal Supremo -martes 27- sobre el uso de una tarjeta de empresa para gastos personales.

Uno de los que ya estaban imputados es el ex presidente de la caja, Miguel Blesa, al que se le acumulan los problemas con la justicia. El caso es que la Fiscalía Anticorrupción ha pedido al Juzgado de Instrucción de Madrid Decano imputarle por asignarse una indemnización de 2,7 millones de euros que cobró en 2010.

Además, Anticorrupción ha pedido imputar al propio Blesa y a Ildefonso Sánchez Barcoj, ex director general financiero y de medios de la entidad, por aprobar las excesivas retribuciones, los planes de pensiones y las indemnizaciones de algunos directivos cuando cesaron de sus puestos.

El 'desfile' ante el juez Andreu comenzará el próximo 16 de febrero, cuando acudan a declarar, entre otros, Gerardo Díaz Ferrán, José Antonio Moral Santín y Gonzalo Martín Pascual.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com