• Su matriz francesa necesita dinero para la fusión con Bouygues Telecom.
  • Es el primer objetivo con el que llega a España un banquero, no un teleco, como es Laurent Paillassot.
  • De hecho, lo que es la integración de productos y servicios pasa a un segundo término.
La multinacional francesa Orange está negociando una fusión con Bouygues Telecom, filial del grupo Bouygues, valorada en unos 10.000 millones de euros, propiedad de la familia del mismo nombre y una de las más influyentes de Francia. Ambas empresas lo confirmaron a principios de enero, aunque las conversaciones comenzaron hace algunos meses. Se trata de una gran fusión entre el primer y el tercer operador del país. Aunque las primeras informaciones apuntan a que la operación se cerraría mediante el intercambio de acciones, disponer de liquidez en esos momentos es imprescindible. Ahí es donde entra en escena la filial española. Sin duda, su salida a bolsa proporcionaría esos fondos necesarios para afrontar la fusión en el país vecino. Precisamente, con el objetivo de estudiar la salida a bolsa, tomará posesión de su cargo el próximo uno de marzo, el nuevo consejero delegado de Orange España, Laurent Paillassot (en la imagen). El sustituto de Jean Marc Vignolles es un banquero, no un teleco. Su trayectoria profesional lo dice todo: antes de llegar a Orange, hace poco más de un año para hacerse cargo del área de Experiencia del Cliente y Mobile Banking, Paillassot trabajó en Crédit Lyonnais, en GE Money Bank -filial de General Electric Consumer Finance-, en la caja de ahorros Caisse d'Èpargne Financement y en el grupo Paribas. En definitiva, que llega a España para estudiar la salida a bolsa de la compañía. De hecho, otros objetivos como la integración de productos y servicios, pasan a un segundo plano. Ojo, no es que se vayan a descuidar, ni mucho menos. Sencillamente, no serán la prioridad en el día a día de Paillassot. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com