• La SEPI se ve obligada a renovar con urgencia la cúpula de la empresa pública.
  • Está en el punto de mira de la Operación Lezo por el presunto pago de comisiones en Angola.
  • El mismo motivo porque el que se ha cesado al hermano de Pablo González y a María Jesús Prieto.
  • Ameijide dimite con la conciencia "tranquila" para descargar a Mercasa de la tensión por el caso.

Eduardo Ameijide, presidente hasta el próximo mates de la empresa pública Mercasa, deja el cargo para no comprometer "el buen nombre y la reputación" de la empresa ni el suyo tras la mediática Operación Lezo, según su propia explicación, trasmitida por carta a la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, y a la presidenta de la SEPI, Pilar Platero. Mercasa ya ha cesado a Pablo González, hermano del expresidente Ignacio González, y la directiva María Jesús Prieto Jiménez, en el marco de las investigaciones judiciales. La reacción de la SEPI ha sido la convocatoria del Consejo de Administración, el próximo martes, 25, con la encomienda de "renovar parte de la dirección de Mercasa", como ha señalado en un comunicado en el que se compromete a colaborar con la Justicia. Ameijide, que llegó a la presidencia de Mercasa en 2012, se desmarca de las sospechas sobre la empresa, en el punto de mira judicial por su participada Mercasa Incatema. Y por su actividad en Luanda, capital de Angola, donde construía un mercado de abastos, fue objeto de registro su sede madrileña.  Todo relacionado con los negocios del Canal de Isabel II en el exterior. Eduardo Ameijide asegura que tiene la conciencia "plenamente tranquila", aunque toma nota del impacto que pueden tener las investigaciones judiciales. Ante esa situación, debe "presentar mi dimisión con carácter irrevocable", dice, y descarga así a Mercasa "de la tensión que se pudiese derivar por mi continuidad. Esto me permitirá defender mi proceder al frente de la misma y mi honorabilidad con mucha mayor libertad y dedicación". Andrés Velázquez andres@hispanidad.com