• El Rey de España ha destacado que la Constitución española es "el gran pacto que protege a los pueblos de España en el ejercicio de sus diversas culturas y tradiciones, lenguas e instituciones".
  • También subraya el papel de España en Europa: "No es posible concebir España sin Europa ni Europa sin España".
  • Ha reconocido que España "ha recibido mucho de la UE".
  • Igualmemte, "España ha aportado a la UE sus vínculos históricos con Iberoamérica".
  • También ha recordado las palabras de Jacques Delors: "Rechazo una Europa que no sea más que un mercado, una zona de libre cambio sin alma, sin conciencia".
  • Ayer, Felipe VI llamó a los empresarios a tener en cuenta que las "exigencias éticas" de la sociedad "van mucho más allá de la calidad material de los bienes o servicios".
El Rey Felipe VI ha pronunciado un discurso este miércoles en una sesión solemne del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia), tras haber recibido la invitación del presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, el pasado mes de abril en una visita a las instituciones europeas. Durante su discurso, el Rey de España ha mostrado su "fe en Europa" que nace de "la profunda identidad europea" de España. "España y los españoles somos europeos por cultura y geografía, por historia y también por vocación política. No es posible concebir España sin Europa ni Europa sin España". Ha destacado que la Constitución española es "el gran pacto que defiende, preserva y ampara los derechos y libertades de los ciudadanos, protege a los pueblos de España en el ejercicio de sus diversas culturas y tradiciones, lenguas e instituciones y consagra la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político cmo valores esenciales de nuestra convivencia". "Europa se ha construido sobre la voluntad de sumar, no de restar; de aunar y no dividir; de saber compartir y ser solidarios". "Tengan la seguridad de poder contar con una España leal y responsable hacia el proyecto europeo, con una España unida y orgullosa de su diversidad". Felipe VI ha vinculado los logros políticos, económicos y sociales, "así como la extraordinaria proyección de España en los últimos decenios y en todos los campos", a la voluntad democrática y de progreso del pueblo español y su "firme compromiso con la integración europea". Y también ha reconocido que España "ha recibido mucho de la UE". "Pero al mismo tiempo ha realizado una notable contribución al proyecto comunitario y a la construcción europea". Igualmente, ha subrayado las relaciones de España con Iberoamérica en beneficio de Europa: "España ha aportado a la UE sus vínculos históricos con Iberoamérica". También ha recordado las palabras de Jacques Delors: "Rechazo una Europa que no sea más que un mercado, una zona de libre cambio sin alma, sin conciencia, sin voluntad política, sin dimensión social. Si es allí hacia donde vamos, lanzo un grito de alarma". Por otra parte, el Rey inauguró ayer el congreso anual de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE) que se celebra en A Coruña con el lema 'Valores del directivo para una agenda global', una premisa que incorpora una concepción del ejecutivo "que no se limita al logro de legítimos resultados empresariales". Felipe VI llamó a los empresarios a tener en cuenta que las "exigencias éticas" de la sociedad "que van mucho más allá de la calidad material de los bienes o servicios" y a respetar así valores como "la equidad, la solidaridad y la inclusión de todas las personas" que cohabitan en los mercados que impulsan, dijo, "nuevos códigos de comportamiento empresarial". El monarca dejó claro que el directivo actual debe "cimentar" su actividad en "la tenacidad, el esfuerzo y el ejemplo", además de en la sobriedad y la eficacia y compaginar la búsqueda de la competitividad con el respeto al medio ambiente. "Esto implica buscar modelos energéticos que hagan compatibles las demandas crecientes de energía con el normal desarrollo de la vida en nuestro planeta", advirtió. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com