• Air Canada fue la primera en dejar el país por la inseguridad, en 2014.
  • Desde entonces el goteo de deserciones ha sido incesante: Lufthansa, United, Avianca, Delta Airlines.
  • Iberia lleva a sus pilotos a dormir a Santo Domingo, mientras el Sepla pide a Air Europa que haga lo mismo.
  • Mantienen también sus vuelos otras pocas aerolíneas: Cubana, para conectar con La Habana, American Airlines o TAP, entre otras.
Venezuela nota desde hace años el progresivo abandono de las aerolíneas por la crisis de seguridad en el país, como consecuencia de la situación política, un aislamiento que ha corrido en paralelo al otro aislamiento, internacional, con pocos apoyos, como Cuba o Nicaragua. La deserción para aterrizar o volar desde el país comenzó con Air Canada, en 2014, pero desde entonces no ha cesado. Iberia y Air Europa mantienen de momento los vuelos, aunque con estrategias distintas. Mientras la compañía de IAG evita que sus pilotos pernocten en el país, Air Europa ni eso. Por esa razón el sindicato de pilotos Sepla le ha pedido a la compañía de Globalia que haga lo mismo: que busque una pernoctación alternativa por "la escalada de violencia" en el país. En los dos casos, Venezuela sigue en sus planes de vuelo, a pesar del consejo del Ministerio de Exteriores de no viajar a ese país. Es una plaza a la que atiende desde hace tiempo en el marco de su estrategia para crecer en Hispanoamérica y también porque saben que Maduro ha dejado claro que "aerolínea que se va, aerolínea que no vuelve". La decisión de Air Canada, en cualquier caso, ha sido secundada por muchas compañías como Lufthansa, Latam, Alitalia, o Tiara Air, sobre todo por la deuda en divisas del Gobierno venezolano (en torno a 4.000 millones de euros). En otros casos ha sido por choques directos, como el de la brasileña Gol, por ejemplo, que se retiró, después de ocho años de servicio, ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el Gobierno, que le exigía en 2015 casi 90 millones de dólares. Por razones de seguridad o por la escuálida rentabilidad de ese mercado, han dicho adiós también Aeroméxico o United Airlines. La colombiana Avianca decidió, en julio, adelantar también la suspensión de vuelos a este mes de agosto, después de 60 años. Delta Airlines hará lo mismo en septiembre por la misma razón, la inestabilidad del mercado. Otras, como Aerolíneas Argentinas, se lo están pensando. El pasado día 5 de agosto suspendió sus vuelos, como Iberia, y desconoce si los retomará. Quedan pocas compañías, por tanto, como Air France, que ahora ha suspendido los vuelo; Cubana, que conecta Caracas con La Habana, o American Airlines. Volar o regresar desde Europa es posible, sin ninguna suspensión, con TAP, Turkish Airlines y Air Europa. Rafael Esparza