• Luego se descubrió que un experiodista manipuló las palabras pronunciadas por Ahok en los comicios.
  • Aunque la supuesta blasfemia consistió en decir a los musulmanes que podían votar a alguien de otro credo…
  • De ser declarado culpable, Ahok podría contar hasta cinco años de prisión.
El gobernador cristiano de Yakarta, Basuki Tjahaja Purnama, más conocido como "Ahok" (en la imagen), fue inscrito por la policía en el listado de sospechosos, en un proceso por un supuesto delito de blasfemia. Es el primer giro legal que se da en el caso que viene embistiendo al político desde hace semanas. El general Ari Dono Sukmanto, jefe de detectives, dijo que los inspectores escucharon a 40 testigos y recogieron "pruebas" suficientes para iniciar un expediente. Ahok no ha sido arrestado, pero no puede dejar el país, informa Asia News. El gobernador, de etnia china, es acusado de ser un "blasfemo del Islam". Durante unos comicios celebrados en septiembre, él habría citado la 51 sura de Al Maidah (quinto capítulo del Corán) -que sugiere a los musulmanes no votar a un líder de otro credo- pidiendo a los fieles islámicos no "usarla" de manera equivocada. Movimientos islámicos, moderados y radicales, se descargaron contra el político, que luego se excusó y fue "perdonado" por la comunidad moderada. El 4 de noviembre, casi 100.000 radicales islámicos tomaron las calles para exigir la condena de  Ahok y el retiro de su candidatura a gobernador en las elecciones a celebrarse en febrero de 2017. La manifestación, que derivó en episodios de violencia, estuvo atravesada por infiltraciones de agitadores políticos, con el objetivo de desacreditar al presidente Joko Widodo, aliado del gobernador. Luego se descubrió que Buni Yani, experiodista y profesor de comunicación en la London School del centro de Yakarta, manipuló las palabras pronunciadas por Ahok en los comicios, tornándolas ofensivas para el Islam y desencadenando las protestas. Un petitorio que solicita que se abra un proceso contra Yani ya ha recolectado 100.000 firmas. El general Tito Karnavian declaró que las audiencias del caso Ahok serán transmitidas en directo por la TV nacional, de modo que los ciudadanos vean qué ocurre en los casos de "difamación de la religión", y estén satisfechos con el éxito de las investigaciones. De ser reconocido culpable, Ahok podría contar hasta cinco años de prisión. Es decir, un caso claro de persecución a un cristiano por el hecho de serlo. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com