• Es la gran operación ideada por Luis de Guindos.
  • Al Ceo de Bankia no le gusta el impuesto a la banca del PSOE, ni para pensiones ni para devolver ayudas públicas.
  • Tranquilos, hay tiempo suficiente para privatizar Bankia y, sobre todo, hay apetito en el mercado.
  • La marca BMN desaparecerá en cuanto se culmine la integración tecnológica.
  • Por primera vez, Goirigolzarri no ha presentado los resultados anuales: explicará el nuevo plan estratégico del banco el 27 de febrero.
La gran operación que persigue el ministro de Economía, Luis de Guindos, es la fusión BBVA-Bankia, que daría lugar a un banco capaz de acompañar al Santander en la lista de entidades sistémicas europeas. Ahora bien, como adelantó Hispanidad, no habrá fusión si Francisco González no quiere. En cualquier caso, no es algo que se vaya a cerrar en el corto plazo. "No hay nada encima de la mesa hoy por hoy", ha respondido José Sevilla este lunes, durante la presentación de resultados anuales de Bankia (en la imagen, a la derecha del director financiero, Leopoldo Alvear). Para el consejero delegado de Bankia, el nivel actual de concentración bancaria es razonable. ¿Más fusiones? "No sé si hacen falta", ha señalado. Sea como fuere, Bankia no contempla otra operación corporativa en 2018 más allá de la integración de BMN. Así que, tranquilos. A Sevilla no le gusta el impuesto propuesto por el PSOE a la banca. Y no le gusta, ni para pagar las pensiones ni para recuperar el dinero del rescate bancario. Sevilla cree que el problema de las pensiones no se soluciona con parches sino con acuerdos que garanticen la prestación a largo plazo. ¿Y para pagar el rescate? Sevilla niega la mayor: el dinero público no rescató a la banca sino a los depositantes. Tema recurrente: la privatización de Bankia. El plazo marcado por Europa finaliza en diciembre de 2019. Tiempo suficiente, según Sevilla, para que el FROB se desprenda del 60,6% que aún mantiene de la entidad. "El mercado está con apetito", "habrá oportunidades y ventanas", ha señalado. Al margen de la privatización, hay algo que empieza a preocupar a más de uno: la debilidad de los ingresos. Dicho de otra manera: los márgenes, aunque mejoran poco a poco, siguen en negativo. El negocio no acaba de remontar. Sevilla lo tiene claro e insiste: cuando a la buena marcha de la economías se una la subida de tipos de interés, veremos unos márgenes con crecimientos significativos. Eso está muy bien, pero, ¿qué ocurre si los tipos no suben y la economía se resfría? Bankia, como el Santander, camina hacia la marca única. Es decir, en cuanto concluya la integración tecnológica con BMN, la marca Banco Mare Nostrum será historia. Si todo va bien, la integración total se producirá el 19 de marzo. Un último apunte: por primera vez desde que asumió la Presidencia, José Ignacio Goirigolzarri no ha presentado los resultados anuales de Bankia. No le busquen tres pies al gato: se reserva para el próximo 27 de febrero, fecha en la que presentará el nuevo plan estratégico del banco. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com