• La cablera asturiana mejora un 2,6% los ingresos en el primer semestre, hasta 72,3 millones.
  • La integración en Euskaltel está en marcha, mientras García Erauzkin mantiene su apuesta por la asturiana.
  • De momento toca lo que toca, como gran operador del norte, pero "nunca se puede decir que de esta agua no beberé".
  • MásMóvil está en medio y Jonh Hahn (responsable de Providence, máximo accionista de la teleco) busca un  pelotazo.
Euskaltel ha dado la cifra de ingresos en el primer semestre de Telecable, cuya integración en la compañía vasca ya está en marcha. Crecen un 2,6%, hasta 72,3 millones, mientras que el resultado operativo cae de 7 a 4,6 millones de euros, debido a las inversiones en contenido de fútbol, los mayores costes de acceso móvil y los gastos no recurrentes de la venta a Euskaltel. Ahora bien, el interés está, sobre todo, en los nuevos pasos que puede dar Euskaltel para crecer. De momento se limita a su zona geográfica, el norte, y la digestión de la asturiana, pero su presidente, Alberto García Erauzkin (en la imagen), no cierra la puertas a nada porque "nunca se puede decir que de esta agua no beberé", ha dicho al ser preguntado al respecto. De momento, toca lo que toca. Erauzkin, en su visita a Oviedo, ha asegurado que Euskaltel mantiene su apuesta "para que Telecable siga siendo una empresa potente en Asturias", lo que implica sostener las inversiones (marca, empleos y puntos de venta). La teleco vasca compró la cablera a la compañía británica Zegona por 686 millones, que le ha convertido en el gran operador del norte (de Galicia -donde adquirió, en 2015, la compañía R- al País Vasco) y el cuarto operador de España (después de Telefónica, Vodafone y Orange), aunque factura menos que MásMóvil, hacia donde podría disparar Euskaltel, aunque no es fácil (la capitalización de la vasca ronda los 1.400 millones y la de MásMóvil los 1.100 millones). Tras el acuerdo, firmado en mayo, Zegona será el segundo accionista después la ampliación de capital, con un 15%, operación que diluirá la participación del accionista de referencia, Kutxabank (25,85%), y de Corporación Financiera Alba (11%). Ya les hemos contado la posible aspiración del PNV para jugar un papel en el sector de las telecos, de la mano de Euskaltel, lo que plantea la entrada en escena de MásMóvil y ¿quién se comerá a quien?, sin perder de vista que también puede caer en manos de Orange, un pelotazo al gusto de Jonh Hahn, máximo responsable del fondo Providence, principal accionista, a su vez, de MásMóvil. Sería el segundo, después de la venta de ONO a Vodafone en 2014 por 7.200 millones. Rafael Esparza