• Esa planta era la principal consumidora del cloro que produce la fábrica de Villa Seca I de Ercros.
  • El grupo desiste de las inversiones para sustituir la tecnología de mercurio, que prohíbe Bruselas.
  • Es otro grano en Ercros, que ha reducido su plantilla un 35% desde 2007 por los márgenes estrechos al negocio químico.
  • La medida de Covestro, antigua Bayer MaterialScience, hoy separada del grupo, reduce la facturación de Ercros en 80 millones.

El grupo químico Ercros, que no pasa precisamente por su mejor memento -arrastra una profunda crisis desde hace tres años-, ha comunicado este miércoles a la CNMV que recudirá su plantilla entre 150 y 200 personas. Es el daño colateral que le ha supuesto el cierre de la planta de Covestro, antigua Bayer, anunciado el mes pasado y que será efectivo a partir de diciembre de 2017. Una cosa ha llevado inevitablemente a la otra, por tanto. La principal consumidora  del cloro de la fábrica Vila-Seca I de Ercros era precisamente la planta de Cosvestro. Y así las cosas, el grupo químico que preside Antonio Zabalza (en la imagen) desiste de la inversión que se había planteado en esa planta para sustituir la tecnología de mercurio, que representa actualmente el 70% de capacidad de producción de Vila-Seca I, según el comunicado a la CNMV. La UE ha vetado el uso de esa tecnología en la producción de cloro a partir de 2017. El grupo químico ha calculado, además, que el impacto de esa prohibición reducirá su facturación en unos 80 millones de euros, que representan el 15% de su facturación anual, a partir de 2018, y recortará su Ebitda ordinario entre 5 y 10 millones de euros. Ercros reducirá un 55% su producción de cloro -que mantendrá en otras plantas en las que sí ha reconvertido la tecnología- y espera compensar ese impacto por otras vías, como las que le han permitido volver a los números negros en 2015. Y todo esto ocurre en una empresa, Ercros, que ha tenido que recortar empleos en paralelo a sus márgenes estrechos del negocio químico. En ocho años, ha reducido su plantilla un 35%. Daba trabajo a 2.100 personas en 2007 y ahora a 1.300. La travesía en el desierto de Ercros ha durado cuatro años. Terminó en el primer trimestre de 2015, cuando ganó 400.000 euros. No era mucho, pero era el primer beneficio desde 2011. Y al cierre de septiembre, su beneficio era ya de 5,58 millones, un 104% más. Pero tiene pendiente contentar a los accionistas, irritados con la sucesivas ampliaciones de capital. Los antecedentes del nuevo recorte de plantilla de Ercros están, en cualquier caso, en el anuncio previo de Covestro, que se llama así desde septiembre de 2015. Su nombre anterior era Bayer MaterialScience, pero el grupo Bayer decidió convertirla en una empresa independiente en 2014, con la intención de sacarla a bolsa, en principio a mediados de este año. Cavestro justificó el cierre de la planta de Tarragona en que dejará de producir MDI, una materia prima del poliuretano y la medida afectó a 120 trabajadores. Andrés Velázquez