• Cierra 2016 con números rojos de 1.464 millones, muy lejos de los 8.821 millones de 2015.
  • Depende en un 85% del área de producción y exploración: sufre el cierre del centro de Val da Agri.
  • Corrige la tendencia en el último trimestre (ganó 340 millones) por la subida de precio del crudo.
  • ENI está entre las petroleras que han capeado mal el temporal, como Chevron o Statoil.
La petrolera estatal  italiana ENI sigue en pérdidas aunque van a menos, como muestran sobre todo los resultados del último trimestre. En el conjunto de 2016, los números rojos fueron de 1.464 millones, nada que ver con la perdidas un año antes, de 8.821 millones, y algo mejor de lo esperado. Entre octubre y diciembre, sin embargo, ganó 340 millones, con un balance favorable del 103,9%, gracias al aumento de los precios del petróleo. ENI si sitúa de este modo entre las petroleras que capean el temporal como pueden pero continúa en rojo. O sea, no ha terminado de superar la crisis que ha dejado herido al sector por la caída de los precios de petróleo. De hecho, la italiana es la única de las grandes cuya cotización sigue en negativo tras dos años de batacazo. En el año ENI pierde más de un 7%. Está en la misma situación, por ejemplo, que Chevron, la cuarta por tamaño, o Statoil, que también. Ya se lo comentamos, raíz de los resultados de Repsol, en un momento dulce por su beneficio, como ya había adelantado la bolsa, que le coloca entre las petroleras más rentables del mundo, por encima de líderes como Exxon, Shell o BP. ENI sigue mostrado debilidad tanto en el área de donwstream (refino, química y comercialización) como en upstream (exploración y producción). Ojo, pero de esta última dependen el 85% de su negocio total y le afectó de modo notable el cierre del centro de Val da Agri (sur de Italia) que ya ha vuelto a la normalidad. Con todo, ha producido una media de 1,76 millones de barriles diarios en 2016, aunque en el último trimestre fue de 1,86 millones de barriles. ENI redujo un 48% su beneficio operativo anual (2.320 millones de euros) con un flujo de caja un 37% inferior al de hace un año (7.673 millones). Según el consejero delegado, Claudio Descalzi (en la imagen), están en condiciones de afirmar que han cerrado trienio de reestructuración en el peor contexto y que en el próximo cuatrienio, gracias a los proyectos en marcha, invertirán la tendencia hacia un crecimiento productivo del 3%. Rafael Esparza