• Moon Jae-In asegura que impedirá la escalada militar "a toda costa".
  • Dice a Kim Jong-un que no se le ocurra lanzar un misil con ojiva nuclear.
  • Y aclara además que Seúl puede bloquear cualquier acción militar de EEUU en la zona.
El presidente surcoreano, Moon Jae-In, se ha desmarcado del pulso verbal de Trump y Kim Jong-un para decir que hará todo lo posible con el fin de impedir otra Guerra de Corea, que partió en dos el país y obligó a todos los surcoreanos a reconstruir el país desde las ruinas. "Voy a impedir la guerra a toda costa", ha dicho, dejando al margen el "fuego e ira" del presidente norteamericano o la infeliz respuesta del líder norcoreano de lanzar sus misiles contra la isla de Guam. Y Kim Jong-un envainó después con que podría cambiar de opinión. Pues bien, lo que ha dicho el presidente surcoreano, que ha cumplido ya 100 días en el cargo, es que Seúl puede bloquear cualquier acción militar de EEUU en la zona porque "nadie puede tomar una decisión en la península coreana sin nuestra autorización". Ese detalle, no obstante, ya señaló que consultaría cualquier opción "buscando el acuerdo con la república de Corea". Pero el mensaje más duro lo ha lanzado contra su vecino del norte, para que no cruce "la línea roja" de lanzar un misil intercontinental con una ojiva nuclear. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com