• Lo ha repetido el lunes la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
  • Ha añadido que el 'procés' tiene "mucho de postureo" y "mucho de campaña".
  • Destaca que el apoyo social a la independencia está "bajando notablemente" en Cataluña y en todos los países de nuestro entorno.
  • "Cataluña está hastiada de su propaganda (la de la Generalitat)", ha afirmado.
  • Y destaca la censura a los no independentistas.
Unas 30.000 personas, según la Guardia Urbana de Barcelona, se concentraron ayer domingo en Montjuïc bajo el lema "Referéndum es democracia", convocadas por los partidos y las entidades soberanistas catalanas en apoyo a la consulta anunciada por la Generalitat para el 1 de octubre. El acto concluyó con la lectura de un manifiesto por parte del ex entrenador del FC Barcelona Josep Guardiola, que llamó a los ciudadanos a acudir a las urnas, "aunque el Estado no quiera", y pidió ayuda a la comunidad internacional para que el referéndum se pueda celebrar. "Hoy el Estado español persigue hasta el debate político. Una amenaza que se hace extensiva a todos los demócratas y a todas las instituciones catalanas", señaló. Hoy, en TVE, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría no parecía sentirse muy afectada por las palabras del exjugador de la selección española de fútbol -manda huevos, que diría Trillo- y se ha referido al referéndum independentista en Cataluña anunciado para el 1 de octubre y ha insistido en que "no se va a celebrar". Lo ha tachado de "mucho de postureo" y "mucho de campaña" ya que solo sirve para crear un "clima preelectoral". A su juicio, la estrategia de la Generalitat de Cataluña es "tensionar" para "aglutinar a los propios", ya que el apoyo social a la independencia está "bajando notablemente" en Cataluña y en todos los países de nuestro entorno. "Asistimos a una estrategia de movilización de la Generalitat. Provocar al Estado, el victimismo... Cataluña está hastiada de su propaganda", ha dicho Sobre las medidas que emprenderá el Gobierno de Mariano Rajoy si Puigdemont persiste en su propósito, ha asegurado que "ya hay medidas adoptadas que están impidiendo la celebración del referéndum", refiriéndose a la sentencia del Tribunal Constitucional de febrero en la que se avisa de que "cualquier acto preparatorio es ya inconstitucional". Por todo ello, ha advertido de que "cuando lo convoquen, no va a ser empezar a impedir su convocatoria, sino que ya el Estado, que es mucho más que el Gobierno, trabaja para restablecer y mantener la legalidad". Asimismo ha querido tranquilizar a los funcionarios porque la Generalitat no puede "forzar a incumplir la ley" y también ha garantizado que el dinero que se pudieran gastar en el referéndum no saldrá "de los impuestos de los catalanes". Por otro lado, ha criticado que los que promueven la consulta independentista tienen "un discurso único" y que "silencian" a los que piensan de manera diferente a ellos. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com