• La Iglesia copta ortodoxa de Egipto ha definido que Sam'an Shehata es un "mártir", asesinado por "odio a la fe".
  • O sea, por Cristofobia, odio a Cristo.
  • Y ha llamado a las autoridades del Gobierno egipcio a cambiar "la cultura de una nación que está envenenada por el extremismo".
Egipto sigue consternado por el bárbaro asesinato de un sacerdote copto ortodoxo, ocurrido en una zona situada en los alrededores de la capital. En los últimos días, en los medios estaría circulando un video que muestra al sospechoso tras los pasos de la víctima, para luego atacarla reiteradamente en el rostro y en el cuerpo. Pues bien: el asesino de Sam'an Shehata, sacerdote copto ortodoxo egipcio apuñalado a muerte el 12 de octubre pasado, es un "criminal conocido para las fuerzas del orden", llamado Mohamed Sonbaty. Es lo que afirma en un comunicado el obispo de Beba Abba, Estaiganous, al comentar el "martirio" del sacerdote, detrás del cual habría elementos de matriz confesional. Según las primeras informaciones, el homicida sería un "extremista fanático" de religión musulmana que en el pasado había atacado a sus mismos familiares, publica Asianews. La Iglesia copta ortodoxa de Egipto ha definido que Sam'an Shehata es un "mártir" asesinado por "odio a la fe" y ha llamado a las autoridades de gobierno a cambiar "la cultura de una nación que está envenenada por el extremismo". El funeral se llevó a cabo el 13 de octubre pasado, al día siguiente del homicidio, en Beni Suef, cabecera de la gobernación homónima, situada a 115 km al sur de El Cairo; en las exequias participaron personalidades de la comunidad local, sacerdotes y numerosos fieles. La Iglesia católica egipcia también se sumó al luto que aflige, una vez más, a la minoría copta. En una nota enviada a AsiaNews, el vocero, Pbro. Rafic Greiche expresa "dolor" y "cercanía" por la muerte "del mártir" y asegura "la oración" de toda la comunidad católica por su familia y "por la paz" en el país. Mohamed Sonbaty está en prisión en virtud de una medida de custodia cautelar que vencería hoy. Las autoridades están verificando eventuales lazos con grupos fundamentalistas activos en Egipto. En el pasado, el hombre había atacado a los familiares e incluso incendió su casa. Según fue declarado por algunos vecinos, que pidieron mantenerse en el anonimato por temor a represalias, él sería un "conocido radical" islámico. El Gran Muftí de Egipto, el jeque Shawki Allam, también condenó el ataque, equiparándolo con el atentado que, en los últimos días, provocó la muerte de seis hombres de las fuerzas de seguridad. El líder musulmán se refirió al "terrorismo brutal" que no distingue entre "militares, civiles o entre un musulmán y un cristiano copto". Él hace un llamamiento dirigido a todo el país, para que se muestre "unido" ante la amenaza de grupos que "quieren desestabilizar". Sin embargo, en las últimas, horas tanto en los medios sociales como en la web, está circulando un vídeo de otro líder musulmán, el predicador y jeque Samir Hashish, el cual afirma que los asesinos de aquellos que no son musulmanes, a quienes él considera "infieles", no deben ser castigados "con severidad". Él afirma que "no deben recibir la pena de muerte" porque "la sangre de un no-musulmán no es preciosa como la de un musulmán". En los últimos meses, la comunidad cristiana egipcia fue blanco de una serie de atentados, entre los cuales figura el asalto a un bus de peregrinos coptos en el mes de mayo, que causó la muerte de decenas de personas. Desde diciembre, suman casi cien los miembros de la minoría religiosa (aproximadamente el 10% de la población total, de más de 90 millones de habitantes) que han muerto en los ataques perpetrados por fundamentalistas islámicos. Entre ellos, están las víctimas de las explosiones en las iglesias ocurridas en el Domingo de Ramos, y los fieles fallecidos en el contexto del ataque a la catedral copta de San Marcos en Abassiya, El Cairo, en diciembre del año pasado. Los atentados fueron reivindicados por milicianos del Estado Islámico (EI), activos en el país. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com