• La protesta se activó después de la decisión de las autoridades de ponerle un techo a los aumentos salariales (un 9%) en un año en el que los pronósticos más benignos sitúan la inflación en el 20%.
  • Al finalizar 2017, rebajó por ley las pensiones un 10%.
  • Mientras planea una drástica reforma laboral, y en medio de una caída del salario entre el 6% y 10%, el Gobierno dispuso nuevos tarifazos.
  • Los aumentos del servicio de luz entre 2017 y el presente febrero llegaron al 1700%.
  • El transporte público se incrementó un 66% desde abril pasado.
  • Tras ganar las elecciones parlamentarias de octubre, el macrismo entendió que la sociedad la autorizaba a profundizar el ajuste.
  • El Gobierno confía en que mientras el movimiento obrero y el peronismo no se unan, sus posibilidades de la reelección presidencial en 2019 permanecen intactas.
Corren malos tiempos para el 'macrismo'. Decenas de miles de personas han ocupado nuevamente la Avenida 9 de Julio, la más ancha e imponente de la capital argentina Buenos Aires, para rechazar el programa económico del presidente Mauricio Macri. Los organizadores de la protesta -sectores sindicales y movimientos sociales- calcularon en 400.000 las personas que se unieron en el repudio al "Gobierno de los CEOs", como los llamó Esteban Castro, uno de los oradores, en relación a los antecedentes de buena parte de los ministros de Macri en la banca internacional y las grandes empresas. "Gobierno de patrones", los definió Hugo Yatsky, del sindicato de maestros. Antes de que la 9 de Julio, "la avenida de la lucha", fuera poblada por manifestantes, el presidente llamó al diálogo y a "construir soluciones" sin "extorsiones, sin comportamientos mafiosos", informa El Periódico. La protesta se activó después de la decisión de las autoridades de ponerle un techo a los aumentos salariales (un 9%) en un año en el que los pronósticos más benignos sitúan la inflación en el 20%. Tras ganar las elecciones parlamentarias de octubre, el macrismo entendió que la sociedad la autorizaba a profundizar el ajuste. Al finalizar 2017, rebajó por ley las pensiones un 10%. Mientras planea una drástica reforma laboral, y en medio de una caída del salario entre el 6% y 10%, el Gobierno dispuso nuevos tarifazos. Los aumentos del servicio de luz entre 2017 y el presente febrero llegaron al 1700%. El transporte público se incrementó un 66% desde abril pasado. El ajuste es una necesidad imperiosa de un Gobierno que tiene el déficit de comercio exterior más elevado de las últimas cuatro décadas y, como no ingresan dólares genuinos, se endeudó en el exterior por más de 100.000 millones de dólares. El pasivo del sector público ha llegado al 24,4% del PIB en 2017, apenas ocho puntos menos que en diciembre de 2001, cuando la economía argentina se hizo trizas. El sector del sindicalismo y los movimientos sociales convocantes de la protesta están convencidos que este nuevo humor social reunirá cada vez más a parte de los hombres y mujeres que eligieron a Macri. El Gobierno confía no obstante en que mientras el movimiento obrero y el peronismo no se unan, sus posibilidades de la reelección presidencial en 2019 permanecen intactas. A pesar de las malas noticias económicas, percibe que puede contentar a esos millones que celebran el encarcelamiento de varios dirigentes kirchneristas aunque no hayan sido condenados por un tribunal. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com