La Audiencia Nacional juzga desde este lunes a los ocho jóvenes de Alsasua (Navarra) detenidos por agredir presuntamente a dos guardias civiles y sus parejas en un bar de la localidad en octubre de 2016. Los jóvenes están acusados de terrorismo y el fiscal pide penas que van de los 12 a los 62 años de cárcel y que suman 375 años. Tres de ellos se encuentran en prisión preventiva, informa RTVE.

Este lunes han comenzado a declarar los acusados y está previsto que el martes lo hagan los guardias y sus parejas. El primero en declarar, Jokin Unamuno, ha asegurado que no golpeó a nadie. Además, ha insistido en que iba "muy borracho".

Unamuno ha añadido que cuando entró en el bar donde ocurrieron los hechos se enfadó con los agentes porque le habían puesto cuatro multas, recoge Onda Cero. "Le dije que menuda jeta que tenían porque se dedicaban a crujir a multas a los jóvenes del pueblo y que luego acudían a los bares”.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 15 de octubre de 2016 durante las fiestas patronales. Según la acusación, los guardias civiles y sus parejas se encontraban en un bar de Alsasua cuando fueron reconocidos por uno de los acusados. Al poco tiempo un grupo de unas 25 personas les rodearon y amenazaron de muerte, conminándoles a que se fueran.

fueron expulsados a golpes y agredidos también fuera del local, "con gran violencia y brutalidad"

Finalmente fueron expulsados a golpes y agredidos también fuera del local, "con gran violencia y brutalidad", según el escrito de la acusación. Uno de ellos sufrió fractura de un tobillo y el resto tuvieron que ser atendidos en el hospital.

La Fiscalía relaciona a los agresores con la campaña Alde Hemendik ('Fuera de aquí'), cuyo origen se remonta a los años 70, y que pedía la salida de Navarra y País Vasco de la Guardia Civil, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. La Fiscalía engloba estas campañas en la actividad de los partidarios de ETA.

Por su parte, la defensa asegura que se trató de una "bronca de bar" y denuncia la inadmisión de pruebas durante la instrucción.

Inmaculada Fuentes es la madre de Óscar, uno de los guardias civiles agredidos en Alsasua, y tiene claro que el ataque a su hijo "no tiene nada que ver con una pelea de bar". Así lo ha explicado ella misma en Onda Cero donde ha intervenido "para contar la verdad”.

Inmaculada también ha entrado a explicar en detalle cuáles fueron las lesiones que la paliza le causaron a su hijo y le dejaron medio año de baja.

"Primero le tuvieron que coser el labio que lo llevaba abierto y sangraba por la boca y luego le tuvieron que intervenir de forma más grave el tobillo", ha contado y ha aprovechado para agradecer su labor "extraordinaria" a los servicios médicos. Aún así Inmaculada ha querido sacar la parte positiva de esta situación con "el cariño que hemos recibido de todas partes" aunque también ha explicado que no han recibido "ninguna noticia" del alcalde de la localidad navarra.