Sr. Director: El segundo paso que se ha producido en la coordinación de la lucha contra el terrorismo islamista, aunque cargado de incógnitas, es la creación de una alianza islámica militar para combatir "militar e ideológicamente" al terrorismo yihadista.   Una alianza encabezada por Arabia Saudí, que parte con una debilidad que la hace sospechosa: la exclusión de los países de mayoría chií. Pese a que Estados Unidos ha buscado desde años esta alianza, las exclusiones de miembros relevantes del ámbito musulmán, pone en riesgo la realización de sus intenciones. Algunos analistas ya apuntan que se trata más de un contrapoder a la influencia de Irán en la región, que de un apoyo internacional en la lucha contra el terrorismo islamista. Suso M.