Sr. Director: Yo nací y viví en Venezuela, hasta que apareció un  tal Hugo Chávez. Días antes de la llegada al poder de Chávez en ese país, yo formé parte de la primera ola de exiliados venezolanos, que decidieron dejar su casa, su trabajo, su familia, por el temor de lo que me pudiera pasar. No había que ser un adivino, para predecir, cuál era el camino que tenía planificado el señor Chávez con el futuro del país. Y tampoco hay que ser un adivino, para predecir las intenciones de Pablo Iglesias, si asume el poder en España. Chávez se lanzó como candidato a la presidencia, tras fallar una intentona golpista en 1992, pero eso sí, en su campaña electoral, nunca dijo que era comunista, o de ideas de izquierda. Sólo se dedicó a explotar en sus discursos, su odio hacia lo que el calificaba la IV República. Así que mucha gente, le vio, como el salvador, al igual que le ocurrió a Hitler en la  Alemania a comienzo de los años 30. A Hugo Chávez, en su campaña electoral de los 90, se le ocurrió acuñar aquello, de que él era un "Bolivariano", con lo cual, muchos venezolanos, lo definían como un ex militar patriota, no vinculado a ideologías políticas. Pero tras ganar las elecciones, el señor Chávez, empezó a sacarse la careta. Una de las primeras cosas que hizo, tras conocer su victoria electoral, fue viajar a Cuba, en donde, las autoridades de la isla, le recibieron como un héroe. Y a partir de allí, ya conocemos el resto de la historia. Si miramos los antecedentes de la revolución cubana, sucedió algo parecido. Fidel Castro se dio a conocer como un líder demócrata que luchaba contra la dictadura de Batista en la isla. El Gobierno de Batista le metió preso, y muchas personas intentaron hacer gestiones para que le liberaran. El Gobierno cubano, ante la presión internacional, dijo que sólo le dejaría libre, si otro país se lo llevaba. Es decir, que sólo podría quedar libre, si se marchaba de Cuba. ¿Y qué país hizo las gestiones para dejarlo en libertad?... Pues, los Estados Unidos. Así que en 1955, se exilió en el país que le daría su segunda oportunidad. Tal es así, que desde el exilio, organizó su invasión a Cuba, y con ello, tras una cruenta guerra civil, llegar al poder en Cuba en 1959. Al igual que Hugo Chávez, antes de llegar al poder, Fidel Castro, en ningún momento, se le ocurrió decir que era de ideas de izquierda, o comunista. De hecho, las armas, los uniformes, el equipamiento que usaron para enfrentar a Batista, no fue financiado, o prestado por los soviéticos, o algún gobierno de izquierda, o comunista. Ese equipamiento, salió de Estados Unidos. Tras asumir Castro el poder, decidió exigir al Gobierno estadounidense más dinero, con lo cual, los americanos, le dijeron que no, ya que tras asumir el poder, en la isla, Castro se dedicó a fusilar, encarcelar, y torturar a funcionarios, o amigos del anterior régimen de Batista. Con esa situación, los estadounidenses, se negaron a seguir dándole dinero, y el señor Castro, vendió su alma al mejor postor: los soviéticos. Hoy, en España, nos encontramos con un personaje, que reúne ciertas similitudes con Hugo Chávez, y Fidel Castro. La diferencia de ese personaje (Pablo Iglesias), es que hace un año, no negaba sus ideas chavistas castristas, comunistas. Pero como hoy está en campaña electoral, trata de disimular sus intenciones, tal como lo hizo Hugo Chávez antes de tomar el poder en Venezuela. Recuerdo algunas entrevistas a Chávez antes de tomar el poder, o durante su primera campaña electoral, en donde decía a los cuatro vientos, que él, era un profundo demócrata, y que las acusaciones de él querer montar una dictadura comunista en Venezuela, solo eran mentiras. A diferencia de Castro, o Chávez, hoy, al señor Pablo Iglesias, prefieren que le llamen "socialdemocrata". Si... ahora resulta que Stalin, Lenín, Fidel Castro, Hugo Chávez, los ayatolás iraníes... son socialdemocratas! En mi tierra, hay un dicho que dice... "Por más que la mona se vista de seda, mona se queda". Esto mismo ocurre con el señor Iglesias. Por más que se pinte de socialdemocrata, comunista se queda. Sólo con ver la "maldita  hemeroteca" de vídeos en Internet, se puede ver su claro perfil ideológico, que hoy, trata de disfrazar. Hay numerosas  declaraciones personales de él, en donde manifiesta abiertamente que es un comunista de línea dura. De hecho, el militó en el partido comunista, y lo dejó, porque consideraba que eran muy blandos. El señor iglesias, hace un año, decía a los cuatro vientos, que el PSOE pertenecía a la casta, y hoy, ve al PSOE como un amigo, sólo por el hecho, de que él, sólo él, y nadie más que él, quiere todos los ministerios, la presidencia, y la vicepresidencia del Gobierno; y porqué no, también nombrar a los jueces, y colocar en los altos cargos de Gobierno a sus familiares, amantes y amigos. ¡Anda ya! Y ahora, se le ocurre decir, que el hombre que arruinó y hundió a España, el ZP, es a quien él le pide consejos. ¡Madre mía! ¿Alguien cree que un tipo así (el coletas), puede gestionar un país? Éste, al lado de Hugo Chávez, Chávez es un angelito. Fernando González