Sr. Director: La multitudinaria pitada a Puigdemont en Badalona ha plasmado el cansancio existente dentro de Cataluña sobre el llamado 'proceso', ese artificio -digámoslo claramente- organizado por una élite política nacionalista con el empeño de montar un estado controlado por ellos. Desde 2010, ya llevamos siete años de continuos 'días históricos', 'cumbres históricas' y 'reuniones trascendentales' junto con elecciones, consultas, plebiscitos y referéndums casi a uno por año en un culebrón que agotaría la paciencia del mismo Santo Job. Puigdemont debería entender el aviso de Badalona: como muestran todas las encuestas, en Cataluña no hay en absoluto ninguna mayoría abrumadora a favor de separarse del resto de España como sería exigible en este tipo de procesos. Continuar empecinado en seguir un camino a ninguna parte solo sirve para aumentar la tensión política, el enfrentamiento con el resto de España y la división dentro de Cataluña. José Aparicio