Sr. Director: En la información televisiva sobre la multitudinaria manifestación de jubilados y pensionistas que tuvo lugar este 22-F a las puertas del Congreso de los Diputados, además de los gritos reivindicando sus justas reclamaciones, en algún momento pudo oírse el consabido lema obamita -adoptado por Podemos- del «Sí se puede». Y como el grupo que salía coreando la anterior proclama, iba acompañado por la imagen de alguna que otra bandera republicana, queda la duda de si ambas notas de identificación podemita sólo pertenecían a un grupo minúsculo o representaba a un número mayor de manifestantes. En cualquier caso, resulta de una ingenuidad impropia de la madurez y sensatez que se presume entre jubilados, considerar que el grave problema de las pensiones lo pudieran resolver los brillantes cerebros de Podemos y sus fieles de la bandera anticonstitucional. Comprobando los «exitosos» resultados de los modelos políticos y sociales que éstos defienden, así como la desgraciada estela de pobreza, miseria y enfrentamientos que van dejando a su paso, es increíble que todavía haya quienes crean que el problemón de las pensiones nos lo solucionarían los inspiradores y admiradores de estos regímenes, capaces de acabar hasta con el abastecimiento de papel higiénico. Miguel Ángel Loma