Sr. Director:

Estamos comenzando un largo período preelectoral y conviene examinar críticamente las declaraciones que hacen políticos de uno y otro signo.

La reforma laboral ha propiciado algo que hasta hace muy poco no era posible en España: con un incremento del PIB inferior al 2% se está creando empleo, se ha ganado en productividad y en flexibilidad, se ha abierto una brecha en una regulación de las relaciones labores que estaba fosilizada.

Pero no conviene ser triunfalista. La reforma laboral no ha conseguido eliminar uno de los graves problemas de nuestro mercado de trabajo: su dualidad. Los que tienen un contrato indefinido suelen gozar de unas condiciones laborales relativamente buenas, mientras que los que no lo tienen reciben a cambio de su trabajo remuneraciones muy bajas y en condiciones muy duras. No es una situación deseable para el futuro. El Gobierno debe vender sus logros pero sin exageraciones. Así ganará credibilidad. La oposición debe reconocerlos si, igualmente, quiere ganar credibilidad.

Jesús D Mez Madrid