El presidente Donald Trump, en este caso por Twitter, ha cesado al subsecretario de Estado, el petrolero Rex Tillerson. Es el cargo que menos suele variar en Estados Unidos, junto al del secretario del Tesoro y al fiscal general del Estado. Le sustituye el jefe de la CIA, lo que ya da pistas. Asegura que no se ponen de acuerdo con Irán, entre otras cosas porque Tillerson no es tan antiiraní, ni tan pro-saudí, como el presidente. Y el problema es que, en este punto, Tillerson tiene razón. El apoyo de Estados Unidos, e Israel, al régimen islámico de Arabia es, cuando menos, peligroso. Están amamantando al monstruo. Y mientras, el primer ministro palestino, Ramdi Hamdala, sufría un atentado en su visita a sus nuevos y presuntos aliados de Gaza. Al parecer, entre la mayoría palestina y Hamas todavía hay diferencias a pesar del reciente acuerdo de paz. Cuidado con Oriente próximo, Donald. Hispanidad redaccion@hispanidad.com